- Por Rosario/12
Carlos Del Frade confía que el Frente Social y Popular conseguirá armar un bloque de tres en la Cámara de Diputados. El diputado provincial, que va por la renovación de su banca, aseguró que habla de los temas sobre los cuales “la política tradicional en Santa Fe no habla”. En diálogo con Rosario/12, el legislador le pegó a los candidatos a gobernador del PJ y Cambiemos, Omar Perotti y José Corral, y le hizo un guiño al socialista Antonio Bonfatti.
–¿Qué análisis hace de la elección en la categoría diputados?
–Estamos bien diferenciados entre todos los candidatos, nosotros tenemos una propuesta que tiene identidad propia y por eso estoy muy confiado de cara al domingo que viene, donde podemos meter tres candidatos y que sean diputados y diputadas.
–¿Cuál es el diferencial del Frente Social y Popular con respecto a sus rivales?
–Somos los que más trabajamos, los que más proponemos, los que más cuestionamos y los que hablamos de temas sobre los cuales la política tradicional en Santa Fe no habla, reforma impositiva, reforma del Poder Judicial, con respecto al narcotráfico hablamos de verdad, metiéndonos en todo lo que tiene que ver con lavado de dinero, complicidades policiales, judiciales, políticas, la relación con el gobierno nacional, Ministerio de Deportes, jornada laboral de seis horas. La política tradicional se ha olvidado de esas cuestiones, tiene más de complicidad que necesidad de transformar, por eso hablan mucho del verbo gestionar.
–¿Por qué no habla?
–Porque han abandonado las viejas banderas transformadoras que les dieron en su momento una gran identidad popular, o que despertaron amor popular. Quedar bien con los factores de poder hace que el costo de la vida sea grandísimo para los sectores populares. Por eso la política no se define por cuestiones complejas, sino por con quien te juntás para hacer cosas. Cuando hicimos junto a Ciudad Futura el sachetazo a 33 pesos, lo que demostramos que cuando te juntás por abajo, con cooperativas y trabajadores, el costo de la vida es mucho más chiquito para la gente. Y eso es una definición, si vos en la política grande de la provincia te juntás con sectores vinculados a la Bolsa de Comercio, las aceiteras, las cúpulas eclesiásticas, tenés las vergüenzas que hoy tenemos. Tenés el banco provincial en manos privadas, la Ley provincial de Educación, que hace setenta años está ausente, sigue ausente, la educación sexual integral sigue estando ausente, y hoy paga más impuestos la gente común que las grandes exportadoras. .
–¿Se mira de costado la elección a gobernador?
–Se le presta atención porque estamos hablando quien se va a hacer cargo de un Estado muy fuerte, la segunda economía de la Argentina, es fundamental ver cómo van a ser las líneas directrices, políticas.
–¿Y qué análisis tiene, en ese sentido, sobre los tres candidatos?
–Creemos que (Omar) Perotti tiene más que ver con Macri que con lo mejor del peronismo y el kirchnerismo, (José) Corral es la expresión de la continuidad del saqueo macrista y (Antonio) Bonfatti tiene la posibilidad de recuperar lo que los militantes socialistas intentan hacer todos los días, que es llevar una política más vinculada con la gente de la que, lamentablemente, llevó Lifschitz en estos años.
–¿Cuán peligroso es que Granata y compañía puedan conformar un bloque numeroso en la Legislatura?
–Granata en sí no es un problema, sino la gente que pueda poner muchas expectativas en ella se van a dar cuenta que, en realidad, es una gran estafa. Hay sectores ultra conservadores, hay representantes del Opus Dei, que probablemente sea lo peor de la iglesia en todo el mundo, con lo cual están más a favor de los crucificadores que de aquellos que multiplicaron panes y peces. Esta alianza de la cúpula eclesiástica santafesina más sectores evangélicos, que tienen más que ver con la dominación que con la liberación, van a generar una gran desazón en aquellos que van a tener mucha expectativa en que Granata va a gambetear el desencanto que le produce la política tradicional. La gente cree que va a votar distinto y nos vamos a encontrar con un conservadurismo y una oscuridad muy fuerte.